La Torre de Londres es una fortaleza medieval. Fue fundada por Guillermo el Conquistador en 1066. Ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Se encuentra en excelente estado de conservación.
En realidad la Torre es palacio, cárcel, capillas, patíbulo y museos, todos juntos dentro de las murallas.
Se encuentra al Este de Londres y la mejor forma de llegar es por el río, pasando bajo el London Bridge, pero también puedes hacerlo en metro o en bus.
La excursión dura un día entero, hay mucho por ver.
Lo ideal es que vayas a primera hora a las Waterloo Barracks a ver las Joyas de la Corona para hacerlo más cómodamente. Vale la pena detenerse a contemplar el diamante First Star of Africa de 530 quilates en el cetro de Carlos II. O los 2.800 diamantes en la Corona Imperial del Estado. O el diamante Koh.I-Noo de la India, en la corona de la reina consorte.
Hay visitas guiadas por los Yeoman Warders o Beefeaters que custodian la torre desde 1485, quienes seguro que amablemente accederán a hacerse una foto contigo.
Una curiosidad: el día que desaparezcan de la Torre los siete cuervos que cuida el Raven Master, caerá la monarquía en el Reino Unido. Por eso podrás ver a las mascotas de la reina volando a placer por los jardines.
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