La gastronomía mexicana cuenta con una gran variedad de productos que le permiten sazonar sus platos con sabores intensos y calidades distintas. Sus platos regionales resultan sorprendentes para el paladar de los millones turistas que visitan el país.

A continuación tienes un índice con todos los puntos que vamos a tratar en este artículo.

Platos principales

Los platos principales de la gastronomía mexicana suelen ir acompañados de salsas, ya sea picantes o con otros ingredientes más suaves como el aguacate. Por su parte, la carne tanto de ternera como de pollo están muy presentes, al igual que los famosos frijoles y las tortillas. En los siguientes apartados te mostramos los más destacados.



Enchiladas

Las enchiladas son similares a los tacos, pero con mucho picante, sin cereales dentro y con abundante queso. Hay quienes las gratinan al horno no solo por el queso que las cubre, sino también por el que hay dentro. Como suele ocurrir con este tipo de comidas, existen diferentes recetas dependiendo de la región.

Así, según el estilo de preparación, la enchilada puede acompañarse bien de carne de pavo, pollo o res, o simplemente de queso. También existen zonas donde se acompaña de una guarnición extra a base de cebolla cruda picada o en rodajas, crema de leche, queso y lechuga.

Por ejemplo, en Guanajuato se preparan las llamadas “enchiladas mineras”, mientras que en Monterrey es común rellenarlas de queso fresco y freírlas en un poco de aceite. Además, se suelen servir con patatas fritas, lechuga y tomate, como si fuera una ensalada. En Sinaloa, por su parte, se les da el nombre de «enchiladas del suelo» y se puede ver cómo se preparan en el siguiente vídeo:

Tacos

Los populares tacos mexicanos son tortillas de maíz rellenas con pollo o cualquier otra variedad de carne, chiles rojos, verdes y amarillos, tomates y cebollas. Se puede decir que son un clásico en cualquier comida mexicana y, probablemente, uno de sus platos más conocidos internacionalmente.

El simple hecho de enrollar una tortilla sobre sí misma ya puede considerarse como “taco”. El consumo de las tortillas de maíz enrolladas de esta manera es muy habitual en México cuando se come sopa o algún otro plato de consistencia líquida.

Los tacos más elaborados y populares alrededor del mundo son los que se rellenan de algún aliño en su interior. De este tipo, se pueden encontrar tres variedades: los tacos al pastor, los tacos de salsa y las flautas, siendo esta última variante la más consistente dado que en este caso los tacos se fríen.

Fajitas

Las fajitas son uno de los platos más populares y consumidos dentro de la gastronomía Tex-Mex, lo que significa que es popular tanto en México como en el suroeste de Estados Unidos. Este plato consiste en tiras de carne asadas a la parrilla junto con una variedad de verduras, entre las que se suelen encontrar: cebollas, chiles, zanahorias, maíz dulce, etc.

Según la historia más difundida acerca de la historia de este plato, su invención se debe a los vaqueros mexicanos que trabajaban en Texas (Estados Unidos) durante la década de 1930. A la hora de comer, se les daban siempre las partes más duras de la vaca, por lo que se veían en la obligación de cocinar muy cuidadosamente esa carne para que fuese comestible.

Los anteriores ingredientes se acompañan de alguna salsa, habitualmente salsa de tomate. Todo ello se sirve sobre una tortilla de maíz o trigo, la cual se enrolla, pero se deja abierta por los dos extremos. Si quieres aprender a cocinar unas verdaderas fajitas mexicanas, no te pierdas el siguiente vídeo:

Burritos

Se trata de un plato muy similar a las fajitas y los tacos, pues los burritos también consisten en una tortilla de maíz o harina de trigo rellena de carne asada y algunas verduras, como chiles, aunque tanto la carne como las verduras son ingredientes opcionales.

La principal diferencia es que incluyen frijoles fritos, ingrediente que no puede faltar en este plato, y que la tortilla va cerrada por uno de los extremos.

De hecho, los burritos son la versión frita de los tacos, razón por la que también son conocidas como flautas o tacos de harina. Su origen se sitúa en el estado de Guanajuato, aunque no obstante en Yucatán un burrito se conoce como coçito, mientras que en Cuernavaca simplemente como taco.

Pozole blanco

En realidad, del este pozole blanco también existen versiones rojas (como la que se hace en Jalisco) y la versión verde (habitual en la Costa de Michoacán). Es una sopa hecha a base de un tipo concreto de maíz conocido como cacahuazintle, a la que se le añade carne de cerdo o pollo como ingrediente complementario.

La receta básica incluye como ingrediente básico granos de maíz del tipo cacahuazintle o cacahuacintle, esto es, una variedad de maíz originaria de México cuyo grano es más blanco, tierno y redondo de lo habitual.

La peculiaridad de este tipo de maíz reside en que, al hervir sus granos, se abren en forma de flor y sueltan una especie de espuma, y esta es la razón por la que se emplean en el pozole.

Empanadas

Las empanadas, realmente, se toman en toda Latinoamérica. Así, por ejemplo, es uno de los platos típicos por excelencia de la cocina Argentina. No obstante en la actualidad, ha traspasado barreras y se cocina en casi cualquier parte del mundo.

En México, donde se las conoce popularmente con el nombre de «antojitos mexicanos«, la receta varía según regiones. En el norte, son comunes las empanadas rellenas de ingredientes dulces; en las zonas de la costa, se añaden pescados y mariscos. En Oaxaca se añaden diferentes variedades de mole, y en la ciudad de Pachuca (Hidalgo) es común añadir carne y patata.

Totopos

Hoy en día, los totopos, más conocidos internacionalmente como nachos, son famosos en el mundo entero. Se trata de pequeñas tortillas de maíz o de harina de trigo fritas y a las que se le da forma triangular.

Normalmente, se sirven cubiertos de abundante queso, pero también se añaden otros ingredientes, como chiles jalapeños o cualquier otra variedad de chile (normalmente, alguno picante).

Quesadillas

Las quesadillas incluyen también tortillas de maíz o de trigo y su ingrediente principal es el queso, de ahí su nombre. Se elaboran a la plancha o a la parrilla y se añade queso hasta que éste queda fundido. Si solo se emplea una tortilla, entonces se sirven plegadas.

Si se coloca una tortilla encima de la otra (de manera que el queso y el resto de ingredientes quedan de relleno), entonces se las denomina sincronizadas. Cuando se incluyen otros ingredientes aparte del queso, suelen llamarse simplemente dobladillas.

Camarón en aguachile

El camarón en aguachile, también denominado simplemente aguachile, es un plato mexicano original de la región de Sinaloa. Su ingrediente base son los camarones, aunque también se añaden otros ingredientes complementarios para potenciar su sabor.

Así, en resumen, los ingredientes principales de este plato son: camarones, pepinos, chiles serranos picados, cilantro, jugo de limón, jugo maggi (sazonador), cebolla morada, sal y pimienta.

Huarache

Este plato se denomina huarache porque la forma que tiene recuerda a las sandalias del mismo nombre que acostumbran a calzar los indígenas de México. Se hace con masa de maíz, más gruesa que la de las tortillas, y por lo general su forma es ovalada.

Se cocinan a la plancha y se cubren de varios ingredientes, entre los que se incluyen los frijoles, la lechuga, el queso fresco, salsas y el relleno principal, que suele ser carne de pollo, aunque también los hay de bistec y de chorizo.

Queso oaxaca

Esta variedad tan particular de queso también es conocida como queso de hebra o quesillo. Se trata de un queso blanco y medio duro de vaca, cuyo origen se sitúa en la región de Valles Centrales (Oaxaca).

Es un queso excelente para ser fundido y, de hecho, gracias a esta característica se emplea como ingrediente base del aperitivo conocido como queso flameado, que también lleva chorizo rojo. Es también el queso empleado para hacer quesadillas.

Queso panela

El queso panela es un queso fresco muy popular en México y de aspecto similar al queso de cabra y al queso ricotta de la cocina de Italia. Es suave al tacto, de color blanco y quebradizo como el queso feta de la cocina griega, porque, de hecho, este queso es herencia de la gastronomía de Grecia. Se utiliza para acompañas ensaladas, tacos, chiles o burritos, entre otros.

Banderillas

Las banderillas no son más que una salchicha empanadas con masa frita en aceite, de manera que quedan crujientes. Se sirven en una brocheta y se les añade alguna salsa picante, como tabasco. Constituyen un aperitivo muy popular en México.

Tortas mexicanas

La torta mexicana es una especie de sándwich hecho de pan, que puede ser pan telera, birote o bolillo. Éste se parte por la mitad y se rellena de varios alimentos, que varían según la región donde se sirva. Pueden servirse frías o calientes y se pueden encontrar en locales denominados torterías o en puestos callejeros.

Se suelen aderezar con mayonesa, crema, jitomate, frijoles, mostaza y cualquier variedad de chile, incluso con varios chiles a la vez, y también se incluyen salsas típicas mexicanas, tales como el guacamole. En 2014 se celebró la Feria de la Torta, en la que más de 90 expositores preparaban su propia versión de la famosa torta mexicana.

Pollo con salsa pipián

El pollo en salsa pipián es pollo aderezado con la famosa salsa pipián mexicana, la cual se prepara con semillas de calabaza y chile verde, lo que le proporciona su característico color verdoso. El pollo se cuece con ajo y cebolla y, después, se cubre con la salsa.

Ceviche de pescado

El ceviche es uno de los platos más tradicionales de México y, en general, se consume en toda América Latina. Se elabora a base de pescados blancos, como merluza, lenguado, corvina, etc. y también pueden incluirse mariscos.

A estos ingredientes, se añaden ramas de cilantro, cebollas moradas, chiles rojos, limón, pimienta y sal. El resultado final se asemeja a una especie de ensalada de pescado.

Alitas de pollo en salsa BBQ

Las alitas de pollo en salsa barbacoa o barbecue son un plato internacional, pero las que se preparan en México se distinguen por incluir chiles chipotle, los cuales se consideran la variedad de chile seco más picante.

Huevos rancheros

Hay quien dice que el origen del término huevos rancheros se remonta a la época en que los jornaleros trabajaban en sus ranchos, cuyo desayuno diario era este plato y de ahí su nombre. Este plato también se conoce con el nombre de desayuno ranchero.

Consiste en huevos fritos acompañados por dos tortillas de maíz o de harina de trigo también fritas. Se cubren con pisto, hojas de cilantro y chiles picantes. También pueden incluirse frijoles o arroz.

Tamales yucatecos

Existen cuatro variedades de tamales yucatecos. Son similares a las hallacas venezolanas, pero, a diferencia de éstas, se cocinan al vapor o al horno.

El tipo de tamal más conocido es el tamal sin hoja, conocido bajo el nombre de tzacol, término de la lengua maya que significa Dios del Cielo y se aplica a esta comida porque se dice que es un manjar de los dioses del cielo.

Se preparan con guiso de pollo y cerdo en achiote, que se introducen dentro de una masa de maíz. La forma más tradicional de cocinarlos es en hornos hechos bajo tierra. Además, existen dos variedades: por un lado, los horneados y, por otro lado, el tamal colado.

Chiles

Los chiles son, en realidad, pimientos. Se traya de un ingrediente indispensable en la comida mexicana ya desde la época Prehistórica, cuando se inventaron recetas que aún a día de hoy se siguen cocinando. Su origen es de México y, en general, de América del Sur y América Central. Los hay con una gran diversidad de formas y colores, picantes y más suaves. Pueden consumirse secos o bien frescos. A continuación se citan algunos de los chiles más conocidos.

Chile chilaca o pasilla

Es un tipo de chile fresco de color verde oscuro, casi negro, con forma alargada, ligeramente plana y retorcida. Es picante y se toma fresco, aunque también puede tomarse seco, en cuyo caso es habitual llamarlo Pasilla. Se cultiva especialmente en los estados de Michoacán, Jalisco y Nayarit.

Chile habanero

De color verde claro, aunque cuando madura el color pasa a ser amarillo-anaranjado, es otro tipo de chile fresco. Su textura es suave y es considerado como la variedad de chile más picante de todas. Es un ingrediente básico en la comida Yucateca y suele tomarse cuando aún es de color verde claro o amarillo, es decir, cuando todavía no ha madurado por completo. No se toma seco.

Chile güero

En realidad, este nombre se aplica a toda variedad de chile que sea de color amarillento, “rubio” o verdoso-amarillento. Los chiles güeros son frescos y varían en cuanto a forma, sabor, tamaño, intensidad del picor, etc. dependiendo de la región de México donde se cultive.

Chile jalapeño

Este nombre proviene del hecho de que se dice que son originales de Jalapa (Veracruz), aunque en la actualidad ya no se cultivan allí. Son chiles fresos, de color verde o verde oscuro, con forma cónica y alargada que a veces son puntiagudos. La piel se caracteriza por ser brillante. Son muy picantes.

Chile manzano

Se trata de un chile fresco en forma de cono, carnoso y con piel brillante de color amarillo intenso. Se considera un chile extremadamente picante, casi al mismo nivel de intensidad que el chile habanero.



Es denominado con diferentes nombres según la región; así, en Michoacán lo llaman “chile perón”, en Veracruz “chile cera” y en Oaxaca “chile canario”, debido a su color amarillento. Cuando se toman secos, reciben el nombre de “chile de cascabel” y adoptan un color rojo oscuro.

Chile serrano

Es un chile fresco de color verde y de forma cilíndrica que, en ocasiones, termina en punta. Es pequeño (unos 3-5 cm de longitud) y es considerado picante. Habitualmente, se come maduro (fresco). Cuando madura, se vuelve de color rojo. Se cultiva en las sierras de Puebla e Hidalgo, de ahí que se denomine “chile serrano”.

Chile poblano

Es un chile de tamaño grande (suele medir unos 12 cm de largo y 6 cm de ancho), carnoso y en forma de cono plano que suele tomarse fresco. Su color es verde oscuro y de piel brillante. No se considera muy picante, pero sí que tiene un sabor característico. Este es el chile fresco más utilizado en la gastronomía mexicana y, por ello, es el más cultivado en el país.

Chile verde

Esta es la denominación que se da a todos los chiles frescos de color verde. Por tanto, los mencionados anteriormente, como el chile serrano, el jalapeño o el poblano, entrarían dentro de este grupo. No obstante, en el centro del país, si se habla de “chile verde”, se hace referencia siempre al chile serrano; en caso contrario, se suele hablar directamente de “chile jalapeño”.

Chile pimiento morrón

Esta variedad de chile fresco es prácticamente siempre de color verde oscuro o rojo, pero también los hay amarillentos e incluso anaranjados. Son de gran tamaño y carnosos. Por lo general, comúnmente se hace referencia a esta variedad de chile como “pimientos” o “pimientos morrones”.

Es considerado como un tipo de chile de sabor dulce. No obstante, no suele emplearse como ingrediente en la gastronomía mexicana, sino simplemente para decorar.

Chile ancho

Se trata de un chile seco de color café-rojizo que mide unos 12 cm de largo y 7 cm de ancho con forma de triángulo. Son flexibles al tacto. Es la variedad seca del chile poblano.

Chile cascabel

Consiste en un chile seco, de forma redondeada e incluso esférica, de color café-rojizo y moderadamente picante, aunque su sabor se considera agradable. Se utiliza para la elaboración de salsas picantes. El nombre de “chile cascabel” se deriva del hecho de que, si lo agitamos, se oyen sus semillas como si se tratara de un cascabel o una sonaja.

Chile chilcostle

Este chile seco es de color rojo oscuro y de tamaño grande (12-15 cm de largo y 3 cm de ancho). Es picante y se cultiva especialmente en la región de Oaxaca, concretamente en Cañada Chica, lo que hace que sea complicado encontrarlo en el resto del país. Se emplea para la elaboración de salsas, guisos, moles…

Chile catarina

Este chile también se conoce con el nombre de “chile Catarinita”. Es de color verde, rojo cuando madura. Cuando se seca, adquiere un color rojo-sepia. Su forma es ovalada y termina en punta. Se utiliza para darle un color rojizo a salsas, guisos, sopas, adobos… Se cultiva en Aguascalientes y también al sur de EE.UU.

Chile chilhuacle

Esta denominación engloba tres variedades de chile seco: el negro, el rojo y el amarillo. Esto se debe a que comparten varias características, tales como su origen oaxaqueño, al secarse mantienen su forma original sin arrugarse y su piel es tersa. El nombre de esta variedad de chile proviene del Náhuatl y literalmente significa “chile viejo”.

Chile chipotle

Se trata de un tipo de chile seco y ahumado, de color café oscuro, con textura arrugada y considerado el chile seco más picante de todos. Es la variante seca del chile jalapeño. El nombre «Chile Chipotle” también proviene de la lengua Náhuatl y significa “chile ahumado”.

Chile piquín

Este nombre se emplea para hacer referencia a todos los chiles que sean de tamaño pequeño y de forma redonda, ovalada y ligeramente cónica. Cuando son frescos son de color verde y, al secarse, adquieren un color rojo sepia.

Chile árbol

Son una variedad de chiles alargados y delgados (7 cm de largo y 1 cm de ancho aproximadamente). Cuando son frescos son de color verde, pero al madurar adquieren un color rojo. Se pueden encontrar en los mercados populares con facilidad. Su sabor es muy parecido al de los chiles serranos y son muy picantes. De hecho, se emplean para dar sabor picante a una gran variedad de guisos.

Salsas

Las salsas frescas, picantes y con un toque ácido son un pilar básico en todo menú mexicano; de hecho, lo que distingue la comida mexicana del resto son sus salsas, cada una con un sabor característico. En muchos platos incluso se mezclan varias salsas al mismo tiempo, lo que proporciona un sabor y una textura únicos al paladar. A continuación enumeramos las principales salsas de la gastronomía mexicana:

Guacamole

Se trata de una salsa elaborada con aguacate. Existen muchas variantes de una zona a otra pero los ingredientes más comunes son aguacate, cebolla, clile verde y unas gotas de limón, aunque muchas gente le añade tomate asado, seco o fresco.

Salsa roja

La denominada salsa roja mexicana se elabora con tomates cocidos, cebolla, ajo, chiles picantes (como jalapeños o manzanos) y ramas de cilantro fresco.

Pico de gallo

Esta salsa es muy popular en la gastronomía de México y se elabora con cebollas, tomates y chiles jalapeños, así como zumo de limón olima. También se conoce con el nombre de salsa fresca. Es una salsa habitual en las fajitas y los tacos.

Salsa verde o tomatillo

Sus ingredientes son los tomatillos, la cebolla, el ajo, los chiles picantes y el cilantro. Se añade a todo tipo de platos, como los tacos, las quesadillas, las fajitas, los burritos, las enchiladas…

Salsa de mango

La salsa de mango tiene un sabor entre dulce y picante, y se elabora con mango (de ahí su nombre), chile cascabel rojo. cebolla, chiles picantes y cilantro. Se añade a cualquier tipo de pollo asado o pescado, así como salsa dip para los nachos.

Mole

De esta salsa toman el nombre varias variantes mexicanas. Básicamente, en su versión más tradicional, es una salsa preparada con cacao, chiles de diferentes tipos, tomates, almendras, pasas, canela, perejil y otras especias.

Salsa picante

Este es el nombre genérico que se emplea para hacer referencia a casi cualquier salsa que sea picante dentro de la cocina mexicana. Como tal, se aplica a casi cualquier plato.

Salsa para enchilada

Esta salsa es específica de las enchiladas y se emplea básicamente para darle un toque picante a este plato. Incluye chiles picantes, cebolla, ajo, salsa de tomate y otras especias.

Tabasco

Eta salsa de sabor picante se prepara con chile tabasco rojo, vinagre, sal y agua, todo ello macerado en barriles de roble. Es originaria del estado mexicano de Tabasco (de ahí su nombre), aunque en la actualidad se ha comercializado como un producto estadounidense y se vende en todo el mundo.

Chamoy

La salsa chamoy se elabora a base de fruta deshidratada, chiles picantes, elote (mazorca de maíz), sal, azúcar, vinagre y agua. Su sabor es una mezcla entre picante, ácido y dulce. Las frutas que se emplean para su elaboración suelen ser el chabacano o el mango. Su aspecto es de color rojizo.

Salsa de jumiles

Los jumiles, chinches de monte o xotlinillis son unos insectos hemípteros comestibles y son el ingrediente principal de esta salsa, tal y como su propio nombre indica. Es consumida especialmente en los estados de Guerrero y de Morelos. Su sabor recuerda a la canela, debido a los tallos y las hojas de encinos de los cuales se alimentan estos insectos.

Queso cheddar

Esta salsa se emplea para dipear, es decir, para mojar. Habitualmente, acompaña a los nachos y se sirve caliente, con lo que el queso queda fundido. El ingrediente principal de esta salsa es, como su nombre indica, el queso cheddar, así como queso de untar, leche, mantequilla, harina de maíz, pimentón dulce y chiles picantes. Su color es amarillento-anaranjado, a causa del al queso cheddar.

Postres

Sin duda, un adjetivo que describe a la perfección los postres típicos de México es “dulce”. El caramelo líquido, la leche condensada y, por supuesto, el azúcar son ingredientes muy empleados en la repostería mexicana. Si quieres conocer cuáles son los postres y dulces más tradicionales de México, sigue leyendo.

Ate de mamey

El llamado «ate de mamey» son, en realidad, trozos del fruto del árbol mamey confitados. Para su preparación se necesitan mameys maduros, almendras picadas, azúcar, canela y aceite vegetal. Se tritura todo y se hace una mezcla homogénea hasta que se forma un almíbar ligero.

Se mezclan todos los ingredientes hasta que la mezcla se asemeja a un puré y, finalmente, se ponen en un molde para darle forma de pequeños dados. Se dejan enfriar en la nevera antes de servirse.

Besos de coco

Los besos de coco son un postre típico mexicano que también se conoce con el nombre de besitos de coco. Se elabora con leche condensada, extracto de vainilla y coco rallado. Todos estos ingredientes se deben mezclar hasta formar una masa homogénea que, finalmente, se horneará.

Cacahuetes garrapiñados

Para la elaboración de este postre se necesitan cacahuetes crudos con cáscara, azúcar, agua y colorante vegetal rojo. Todos estos ingredientes se mezclan y se dejan hervir a fuego medio, hasta que se convierten en una mezcla reseca similar al caramelo.

Dulce de alfeñique

Se trata de una figurilla, habitualmente con forma de calavera, de caramelo o confitura y que se prepara a base de azúcar pura de la caña. Se prepara desde los tiempos coloniales en gran parte de Latinoamérica. La forma de calavera se debe a que es un dulce que suele tomarse el 2 de noviembre, es decir, el Día de los Muertos.

También se conocen con el nombre de calaveritas de azúcar. Su elaboración requiere del empleo de varias técnicas artísticas. Además, durante el Día de los Muertos, se celebra la famosa Feria del Alfeñique y del Dulce Regional, que se lleva a cabo desde 1989 y en ella se ven infinidad de puestos callejeros en los que se vende este dulce. En el siguiente vídeo se puede ver qué nos encontraremos si visitamos la Feria del Alfeñique en México:

Dulce de guayaba

El dulce de guayaba es un postre similar al dulce de membrillo que se elabora con guayabas, una fruta muy popular en México y Colombia y que se considera que tiene propiedades beneficiosas para la salud, entre otros motivos porque tiene un alto contenido en Vitamina C. Este dulce se elabora con guayaba, azúcar o panela, canela y agua.

Manzanas acarameladas

Las manzanas acarameladas o embrujadas son también un dulce típico del Día de los Muertos y la Noche de Halloween. A las manzanas (que deben ser rojas y de tamaño medio) se les añaden otros ingredientes como una taza de vino tinto, agua, crema batida, colorante rojo y azúcar. Existe una versión para niños en la que no se emplea vino tinto, sino jarabe de maíz.

Muéganos

ste postre es típico de la ciudad de Huamantla, en el estado mexicano de Tlaxcala. Este dulce consiste básicamente en mezclar palomitas de maíz con jarabe de piloncillo fundido. El piloncillo es un jarabe que se prepara a partir el jugo de la caña de azúcar tras haber sido puesta a remojo y hervido.

Pastel de zapote negro

El zapote negro es una fruta procedente del árbol del mismo nombre y cuyo sabor recuerda en gran medida al del chocolate, por lo que se dice que este pastel podría ser el sustituto del pastel de chocolate, y mucho más sano.

Tras triturar la fruta hasta que se consigue una especie de puré, se mezcla con azúcar morena, plátano y azúcar granulado. Esta masa se pone en un molde y se hornea hasta que se consigue un pastel o pudin firme y esponjoso. Se sirve frío.

Bebidas

Desde el famoso tequila acompañado de un toque de sal y limón hasta bebidas más naturales hechas a partir de frutas como la limonada o el agua de jamaica, entre otras, en México es muy tradicional acompañar las comidas con una bebida especial. A continuación te enumeramos las más populares.

Aguas frescas

El nombre «aguas frescas» se aplica a aquellas bebidas no alcohólicas hechas a base de agua, frutas, flores o granos, y azúcar. Estas bebidas se toman durante la comida o el almuerzo, y suelen elaborarse en casa. Las más populares son la limonada, el agua de jamaica, la naranjada, el tamarindo y la horchata de arroz. Se sirven frías y son más típicas de primavera y otoño.

Tequila

El tequila es una bebida alcohólica originaria del municipio de Tequila, en el estado de Jalisco. Su elaboración consiste en la fermentación y el destilado del juego del agave azul (agave tequilana). Esta bebida se considera la más conocida internacionalmente y representativa del país.

Es tradición beberlo con sal y limón, debido a que antiguamente en las fronteras de México se servía tequila barato, el cual no se elaboraba con agave azul sino con alcoholes agrícolas que le daban un sabor desagradable. La sal y el limón se añadían para rebajar este sabor.

Mezcal

El mezcal es otra bebida alcohólica que se elabora a base de los azúcares extraídos de las cabeza o piñas maduras de varios tipos de agave. Es una bebida incolora o ligeramente amarillenta.

Pulque

El pulque es una bebida alcohólica fermentada es tradicional de México y de origen prehispánico. Se prepara a partir de la fermentación del mucílago, popularmente conocido con el nombre de aguamiel, el agave o el maguey pulquero. Aunque se consume en todo el país, es especialmente popular en Guanajuato, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Puebla, Hidalgo, Veracruz y San Luis Potosí, entre otros.

Tepache

El tepache es otra bebida fermentada muy popular en México, aunque su nivel de alcohol es bastante bajo. Su sabor es similar al de la cerveza, salvo que tiene un toque dulce. Es habitual que para su elaboración se emplee maíz, especialmente en las comunidades indígenas de Oaxaca, Querétaro, Puebla, Sinaloa, Yucatán, Chiapas, Tabasco…

Se considera que esta bebida se tomaba ya como símbolo de culto religioso en los tiempos de los mayos. Actualmente, se obtiene de la fermentación de frutas variadas como la piña, la manzana, la guayaba o la naranja, entre otros. Se puede comprar su versión comercializada en supermercados o también su versión casera, de venta en algunos puestos callejeros.

Este artículo ha sido compartido 1013 veces. Hemos dedicado muchas horas para recopilar esta información. Si te ha gustado, compártelo, por favor: